Dentro de Cervantes no creció el autor del Quijote hasta el tiempo de descuento, ya al borde de la consunción física y de la ausencia de expectativas vitales para la época. Con 50 años solo quedaba el retiro y la melancolía, el desengaño por lo hecho o lo no hecho, lo logrado o lo frustrado.
Este contenido no está disponible para ti. Puedes registrarte o ampliar tu suscripción para verlo. Si ya eres usuario puedes acceder introduciendo tu usuario y contraseña a continuación: