El crac del 29: cataclismo mundial

Hace nueve décadas se hundió la Bolsa de Nueva York, activando una de las peores crisis económicas del siglo XX. Exponemos el fantástico enriquecimiento norteamericano de los años veinte, la locura especulativa, el crac y sus relaciones con la Gran Depresión y sus consecuencias políticas, entre ellas el auge del nazismo, que elevaría a Hitler al poder

Edad contemporáneaEl crac del 29: cataclismo mundial

Ninguno de los Congresos de los Estados Unidos hasta ahora reunidos para exami­nar el estado de la Unión tu­vo ante sí una perspectiva tan favorable como la que se nos ofrece en los ac­tuales momentos”, decía el presidente norteamericano, Calvin Coolidge, en su mensaje sobre el estado de la Unión del 4 de diciembre de 1928, un mes antes de que abandonara la Casa Blanca. Dos años después, la prensa juzgaba a Coolidge como el más mentecato de los políticos yanquis y se le aplicaba el co­nocido chiste: “Calvin Coolidge es la prueba más fehaciente de que cualquier norteamericano puede llegar a presi­dente de los Estados Unidos”.

El cataclismo que había suscitado tal cambio de opinión tenía dos nombres: el crac de Wall Street y la Gran Depresión. Ambos fenómenos desencadenaron el paso de la opulencia y el desenfrenado enriquecimiento a la miseria y la deses­peración. En 1933, el Producto Nacional Bruto era un tercio inferior al de 1929, la producción industrial había descendi­do en un 42 por ciento.

El interior del edificio de la Bolsa de Valores de Nueva York el viernes 25 de octubre de 1929.

Este contenido no está disponible para ti. Puedes registrarte o ampliar tu suscripción para verlo. Si ya eres usuario puedes acceder introduciendo tu usuario y contraseña a continuación:

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

David Solar
David Solar
Exdirector de La Aventura de la Historia

Dossiers

Especiales temáticos sobre los grandes acontecimientos de la Humanidad

Menú

Multimedia

Mapas e infografías de batallas, migraciones, grandes monumentos…

te puede interesar...

"La familia de Carlos IV", de Goya, 1800.

Un real paseo por el Museo del Prado con Juan Eslava...

Uno no olvida nunca la primera sensación que experimenta al pasear por primera vez por la galería central del Museo del Prado. Minerva, nieta...

Mi héroe

Una visión muy personal de los protagonistas de la Historia