La derrota es un accidente común a todos los guerreros y no tiene sentido entristecerse por ella cuando hemos cumplido con nuestro deber. Sólo puedo expresar mi admiración por el valor con que usted y sus marineros lucharon durante el reciente combate y mi admiración personal por usted, que siguió adelante con su difícil deber hasta que fue gravemente herido”. El almirante Togo Heihachiro, el Nelson japonés, visitaba al almirante ruso Zinovi Petrovich Rozhestvenski, postrado en una cama del hospital japonés de Sasebo.
La batalla a la que se refería el almirante Togo era la de Tsushima, librada una semana antes, el mayor choque naval desde que, un siglo antes, el almirante Nelson destrozara la flota combinada franco española en Trafalgar. En los estrechos de Tsushima naufragó, el 27 de mayo de 1905, la suerte rusa en la guerra con Japón.
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